COOKIES DE CHOCOLATE BLANCO
Esta receta fue de las primeras que probé y probé hasta que encontré el punto exacto. Y es que lo reconozco, soy de las que van a una famosa cadena de cafeterías - que puso de moda lo de llevarse el café de paseo que quedaba muy de serie de televisión – y no puede salir de allí sin una coockie de chocolate blanco!!!!
Veamos, esta receta es azúcar más azúcar así que no la queráis disfrazar de integral que no hay manera, hay que cocinarlas sabiendo que tendrás que pasar días corriendo para quemarlas ¡jajaja!
¿Vamos a por ellas?
125gr mantequilla
125gr azúcar morena
125gr azúcar blanca
1 huevo
2.5gr levadura en polvo
250gr harina
300 gr pepitas chocolate blanco
Horno a 175º
Primero de todo un gran aliado para que queden perfectas es el estado de la mantequilla.
Ésta tiene que estar blandita de verdad, así que pensarlo con tiempo y dejarla que se pome. Hay que batirla con los dos tipos de azúcar así que cuanto más blanda está, más fácil es que se nos integre bien con el azúcar.
Añadiremos el huevo y nos quedará todo muy cremosito. Añadiremos entonces la harina y la levadura tamizadas y finalmente el chocolate.
Lo siguiente no tiene truco, hacemos bolitas y las aplastamos sobre papel de horno que hemos puesto encima de la bandeja. Tened en cuenta que crecen y que si las ponéis muy juntas saldrá una galleta gigante ¡de verdad os lo digo!
Y ahora es el punto final, ya que la cocción es muy importante. 10 minutos bastan para que estén perfectas. Al principio siempre me pasaba de tiempo porque parecía que estaban muy blanquitas, entonces pasaban a ser galletas igual de ricas pero duritas. Si las sacamos en el punto de los 10 minutos, notareis las texturas del azúcar … ummmm
¡Mejor no os explico más y contadme como os quedan!
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